miércoles, marzo 23, 2022

Por si acaso.

 Hoy en las noticias me ha llamado la atención que se criticase a la gente que ha hecho acopio de provisiones "por si acaso". Ya llevan unos días hablando de que la gente compra más de lo habitual, pero no se dan cuenta de que "por si acaso" es, junto a su naturaleza cobarde, uno de los ingredientes principales de la condición humana. No es exclusivo del primate desnudo, por si acaso viene de serie en otros seres. No recuerdo a quien se lo leí, pero la cobardía del ser humano es una de sus características evolutivas. Es fácil imaginar la situación hace 10.000 años, cuando esos hombres primitivos escuchaban un ruido por detrás de la maleza. El valiente no le daba importancia, el cobarde corría por si acaso. Si no era nada más que un golpe de aire ninguno moría, el valiente tenía razón, y el cobarde... se volvía más rápido. Si por detrás de las ramas, aparecía un diente de sable, el valiente tenía más probabilidad de convertirse en la comida principal del felino y el cobarde no solo sobrevivía, sino que su genética cobarde, la de por si acaso, era la que tenía más probabilidades de prosperar y la cobardía del por si acaso se convirtió en el rasgo principal que distingue la especie. La humanidad, desde entonces ha evolucionado a golpe de por si acasos, e incluso llegamos a la actualidad en la que un animal representativo de la especie ha decidido invadir el pais vecino, por si acaso. Por si se convierte en un país democrático dentro de la Unión Europea o por si ingresa en la OTAN, donde unos cuantos se han aliado por si acaso. El mismo cobarde ya invadió Crimea, por si acaso se quedaba sin el puerto en el que tenía la mayor parte de su buques de guerra.

Así que no nos debería sorprender que la gente compre unos pocos litros más de leche, por si acaso, no fuera que mañana fueran a comprar leche y no hubiera. A fin de cuentas, ¿quien sabe exactamente cuanto hay que comprar cada vez? Siempre es mejor comprar, por si acaso. Por si mañana decidimos hacer croquetas o arroz con leche y gastamos más que lo que simplemente tomamos con el desayuno. Siempre temenos algo que en su día compramos por si acaso. Claro que es improbable que la falta de suministro dure muchos más días, ¿pero sabe alguien cuantos días va a durar nada? Cualquiera puede salir mañana a la calle y caer fulminado por un rayo, ¿que podríamos decir entonces de todo lo que aún está en su alacena?, que lo compró por si acaso. Igual que cogemos el paraguas por si acaso llueve. Si no está lloviendo no tenemos ninguna certeza de que nos va a sorprender la lluvia, pero si llueve, tendremos el paraguas, si no lo hace solo habremos ejercitado el brazo como aquel que corrió por si acaso aparecía un diente de sable.

Igual que cuando salimos a la calle llevamos algo de dinero en la cartera por si acaso, yo creo que lo más inteligente es no tener la despensa vacía. Resulta curioso ver que en el mismo programa se habla de que hay que tener el depósito del coche lleno. Lo argumentarán como quieran, pero en el fondo están acudiendo al mismo principio, por si acaso.

La cantidad de provisiones que se tiene que almacener, por si acaso, depende en primer lugar del espacio disponible para hacerlo. No estoy hablando de una crisis apocalíptica en la que no solo deberíamos preocuparnos de llenar la despensa sino también de producir y proteger los bienes que vayamos a consumir, en este caso daría igual la naturaleza del alimento, si se come sirve, y la caducidad sería solo una variación en el sabor del alimento y un riesgo a correr antes de morirnos de hambre. Para afrontar crisis puntuales la mejor opción es la de tener almacenados aquellos productos que solemos consumir en la cantidad que normalmente consumimos antes de que llegue su fecha de consumo preferente. La leche sirve para ilustrar el sistema. Si tomamos un litro de leche al día, y caduca en 30 días, no deberíamos tener una despensa de más de 30 litros. De todos modos suele caducar en unos tres meses, por lo que el máximo a almacenar podría llegar a los 90 litros. Si cada 6 días compramos un pack de media docena de litros de leche que caduca al menos 6 días más tarde que la última que compramos, tendremos siempre el porsiacaso para afrontar la mayoría de las crisis y nunca nos sorprenderá sin leche en la despensa. Pero hay que ser selectivo con lo que almacenar. Con la COVID, la gente se volvió loca con el papel higiénico, de hecho no caduca, pero lo cierto es que ocupa mucho sitio y a la hora de la verdad, un bidé suple el uso del papel higiénico. El problema habría estado si nos hubieramos quedado sin agua, pero entonces, ¿como se empuja al papel higienico en el inodoro?

El que compra sardinas enlatadas, pero no come sardinas, se está preparando para un por si acaso muy apocaliptico. Las conservas tienen fechas de consumo preferente de varios años. A mi sí me gustan las sardinas y caducan en el 2027. Me imagino que para entonces ya se ha acabado la huelga, pero no he comprado todas las sardinas que pensaba comprar hasta ese año. Cualquier situación que perdura más de un mes, necesita un plan B. No creo que hubiera mucha gente que en Ucrania tuviera provisiones para más de un mes. No todos los por si acasos son improbables, pero está claro que todos ellos son posibles. 

Así que lo mejor es vivir con el por si acaso. Cuando ya tienes la despensa llena, nadie piensa que compras de más pues solo compras tanto como vas a usar. La diferencia está en que si no lo encuentras cuando vas a reponerlo, en casa siempre tienes la despensa con aquello que almacenaste por si acaso.

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