"El ser es, y el no ser no es." no recuerdo que clásico fue el que hizo esta afirmación, (editado: Fue Parmenides) da igual, es una idea que me vino a la cabeza y despues recordé que alguien antes había dicho algo parecido.
En su día rehize el comentario y afirmé, que el ser es y el no ser es otra cosa, de todos modos esta es una reflexión sobre lo que existe y lo que no, sobre lo que nos debe importar más y lo que no nos debe importar nada.
En el mundo en que vivimos, incluyendo en el mismo a aquel en el que no vivimos para no dejar nada de lado, solo es lo que es. Lo que no es, no es. Aunque ello no es obice para que lo que no sea no pueda llegar a ser, e incluso para que lo que es deje de serlo. Sin embargo, en tanto lo que es no deja de serlo, y lo que no es no deja de no serlo, lo que prima es la primera afirmación por lo que solo es lo que es.
Las implicaciones del párrafo anterior son muchas más que las que podríamos indicar en un simple artículo pero a sabiendas de que parece un galimatias se puede intentar indicar alguna de las mismas para iluminar, aunque solo sea en parte, su significado.
Por lo general la naturaleza humana parece que nos lleva a ser infelices con lo que tenemos (lo que es), deseando alcanzar lo que no tenemos (lo que no es), sin embargo todo lo que se tiene no se tiene desde siempre, por lo que por un tiempo creimos que seríamos felices en cuanto tuvieramos lo que ahora tenemos. Vivimos con la ilusión de alcanzar lo que no es, pero mientras no lo tenemos no debemos contar con que puede ser, (el no ser no es), pues lo único que debe hacernos felices es lo que tenemos (el ser es).
Es solo una de las implicaciones del mismo, probablemente no es la más filosófica, pero si se siguiera, desde luego que sería una de las más prácticas.
En su día rehize el comentario y afirmé, que el ser es y el no ser es otra cosa, de todos modos esta es una reflexión sobre lo que existe y lo que no, sobre lo que nos debe importar más y lo que no nos debe importar nada.
En el mundo en que vivimos, incluyendo en el mismo a aquel en el que no vivimos para no dejar nada de lado, solo es lo que es. Lo que no es, no es. Aunque ello no es obice para que lo que no sea no pueda llegar a ser, e incluso para que lo que es deje de serlo. Sin embargo, en tanto lo que es no deja de serlo, y lo que no es no deja de no serlo, lo que prima es la primera afirmación por lo que solo es lo que es.
Las implicaciones del párrafo anterior son muchas más que las que podríamos indicar en un simple artículo pero a sabiendas de que parece un galimatias se puede intentar indicar alguna de las mismas para iluminar, aunque solo sea en parte, su significado.
Por lo general la naturaleza humana parece que nos lleva a ser infelices con lo que tenemos (lo que es), deseando alcanzar lo que no tenemos (lo que no es), sin embargo todo lo que se tiene no se tiene desde siempre, por lo que por un tiempo creimos que seríamos felices en cuanto tuvieramos lo que ahora tenemos. Vivimos con la ilusión de alcanzar lo que no es, pero mientras no lo tenemos no debemos contar con que puede ser, (el no ser no es), pues lo único que debe hacernos felices es lo que tenemos (el ser es).
Es solo una de las implicaciones del mismo, probablemente no es la más filosófica, pero si se siguiera, desde luego que sería una de las más prácticas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario