lunes, mayo 28, 2007

La herencia de Parménides y los pensamientos de un cenizo

Considero improbable que haya quien se haya percatado de que este Blog no se ha llamado siempre así, "La herencia de Parménides", aún así soy mi principal lector y deseo poder recordar en un futuro las razones del cambio. El por qué del abandono de los "pensamientos de un cenizo" como base de este blog.

En primer lugar he de decir que nunca me consideré a mi mismo como un cenizo, de hecho no creo en la buena o la mala suerte como tal y creo haber escrito sobre ello con la certeza de que la suma de ambos tipos de suerte da cero, vamos que en realidad lo que hacemos es fijarnos más en un tipo de suerte que en el otro lo que al final nos define como una persona optimista o pesimista, y segun la imagen que damos a los demas, como gente con buena o mala suerte.

La denominación del blog como los "pensamientos de un cenizo" podía inducir a error y aunque efectivamente son pensamientos más bien tirando a pesimistas, no hacen una llamada a la mala suerte, solo son un punto de vista de lo que la razón, más o menos lógica, puede dar.

Quizás por eso me decanté por Parménides, el primer racionalista del que se tiene noticias, "Lo que la razón no explica, no existe" y lo de la herencia, es una pequeña modificación a sus palabras ya que con el tiempo se ha visto que la razón ha sido capaz de explicar cosas que antes no se explicaba. Así partiendo del mismo principio, la herencia de Parménides diría que todo lo que existe lo puede explicar la razón.

Por otra parte el racionalismo de Parménides parte de la afirmación de que "el ser es y el no ser no es" algo que parece una perogrullada y que sin embargo ha suscitado curiosas controversias hasta el punto de que para la iglesia se convierte en una especie de persona non grata, y todo porque a partir de dicha afirmación se llegaba a conclusiones como que el movimiento no existe o la anterior de la no existencia de lo que no se puede explicar. Negar la existencia de aquello que no se puede explicar por depender de la fe puede ser considerado por los religiosos como un ataque a su religión... allá ellos. En cualquier caso la religión existe y lo que decía Parménides es que tiene una explicación, que por supuesto puede no gustar a todo el mundo.